Acaba de publicarse en la revista científica Cancer este estudio realizado en 95 mujeres supervivientes a un cáncer de ovarios e inactivas físicamente a las que se dividió en un grupo de control a quienes se proporcionaba el cuidado habitual y otro de intervención consistente en ejercicio físico. El 38% de ellas padecían linfedema secundario en miembro inferior siendo el índice de masa corporal un importante predictivo de sufrir esta patología.
El estudio tuvo una duración de 6 meses en los cuales el grupo de intervención realizó caminatas a intensidad moderada a vigorosa. Los resultados muestran que el ejercicio físico no empeora el linfedema y el grupo de intervención redujo la prevalencia a un 28% mientras que el de control también la redujo pero en menor medida a un 35%.
Dada la alta incidencia del linfedema secundario los autores instan a que se realicen más estudios para poder determinar con más exactitud pautas de ejercicio físico para este grupo de población.
Referencia: Iyer, N. S., Cartmel, B., Friedman, L., Li, F., Zhou, Y., Ercolano, E., … & Irwin, M. L. (2018). Lymphedema in ovarian cancer survivors: Assessing diagnostic methods and the effects of physical activity. Cancer, 124(9), 1929-1937.
Debe estar conectado para enviar un comentario.