La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) ha hecho público el informe anual LAS CIFRAS DEL CÁNCER EN ESPAÑA 2024, en el que se recogen las estadísticas y tendencias de esta patología en nuestro país.
Para el 2024 se alcanzarán los 286.664 nuevos diagnósticos aumentando así en un 2,6% las cifras del 2023. En cuanto a la estimación a medio plazo se calcula que para 2040 la incidencia alcance los 340.000 nuevos casos.
Los cánceres más frecuentemente diagnosticados en ambos sexos serán, al igual que el año pasado, los de colon y recto, mama, pulmón, próstata y vejiga urinaria. Si diferenciamos por sexo en hombres serán los de próstata (30.316), colon y recto (27.009), pulmón (22.483) y vejiga urinaria (18.247). En mujeres los de mama (36.395), colon y recto (17.285) seguidos de pulmón (10.285 lo que supone un incremento del 12,3% respecto a 2023) y cuerpo uterino (7.305). En cuanto al mundo, los cánceres más diagnosticados continuarán siendo el de mama, pulmón, colon y recto, próstata y estómago.
Se sigue haciendo referencia a que el cáncer de pulmón en mujeres continúa en tercera posición desde el año 2019. Este hecho se relaciona con el aumento del tabaquismo entre mujeres desde la década de 1970. Curiosamente el tabaquismo ha descendido en hombres en los últimos años y también lo ha hecho en más de medio punto la incidencia de cáncer de pulmón y de vejiga urinaria en varones.
En las últimas décadas el número absoluto de cánceres diagnosticados en España ha aumentado a causa del aumento poblacional, el envejecimiento de la población, la exposición a factores de riesgo (como el tabaco, el alcohol, la contaminación, la obesidad, el sedentarismo, entre otros muchos) y, en algunos tipos de cáncer como el colorrectal y los de mama, cérvix o próstata, el aumento de los programas de detección precoz.
La prevalencia señala el número de personas con cáncer conviviendo con la enfermedad en un periodo de tiempo determinado. A nivel mundial, se estima una prevalencia de cáncer a cinco años del diagnóstico de más de 44 millones, siendo los cánceres más prevalentes el cáncer de mama, el cáncer colorrectal, y los cánceres de próstata, pulmón y tiroides
En cuanto a la supervivencia, ésta se ha duplicado en España y países europeos del entorno en los últimos 40 años. En cáncer de próstata supera el 90% y en cáncer de mama el 86%.
FACTORES DE RIESGO
Al igual que en los informes de los últimos años, se destaca que un tercio de las muertes por cáncer son debidos a factores de riesgo evitables entre los que se mencionan el tabaco, el alcohol, las infecciones, el sedentarismo, las dietas inadecuadas y la radiación ultravioleta, responsable esta última de la mayor parte de los tumores cutáneos.
Tabaco y alcohol: el informe destaca que según la OMS el tabaquismo es responsable del 33% de los diagnósticos y un 22% de las muertes. Asimismo un informe del IARC publicado en 2020 estima que el alcohol provoca 3 millones de muertes anuales en Europa y se le atribuyen 92.000 muertes debido a cáncer en 2018. En concreto el alcohol está relacionado con el desarrollo de cáncer colorrectal, de mama, de hígado, de cavidad oral, de esófago y de faringe. Se destaca además que NO existe un nivel seguro de consumo. Es más, combinar tabaco y alcohol multiplica por 30 el riesgo de desarrollar carcinomas orales, de orofaringe o de esófago.
Obesidad: el GCO (Global Cancer Observatory) correlaciona la obesidad con al menos 9 tipos de cáncer: mama postmenopáusico, útero, colon, riñón, vesícula biliar, páncreas, recto, esófago y ovario.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Se menciona expresamente el importantísimo papel del ejercicio físico en todas las etapas del cáncer, desde la prevención al tratamiento y la supervivencia y se alerta de que en España el 27,4% de la población adulta se declara sedentaria.
La investigación señala que se estima que el ejercicio físico podría reducir hasta un 30% el riesgo de cáncer de mama, colon, vejiga, endometrio, esófago y estómago, y casi el 20% el riesgo de mortalidad específica por cáncer. Sin embargo, los niveles de actividad física son insuficientes.
Desde el Grupo de Trabajo de Ejercicio y Cáncer de la SEOM se señala que “Realizar ejercicio físico es seguro durante todas las etapas asistenciales del cáncer, incluso durante los tratamientos activos como la quimioterapia, ya que se asocia con una mejor tolerancia a los mismos, e incluso se cree que podría incrementar las respuestas”.
Se señala asimismo la necesidad de una valoración adecuada para prescribir ejercicio físico en este grupo de población.
LEE O DESCARGA AQUÍ EL INFORME COMPLETO EN PDF
- Grado en Radioterapia y Oncología por la University of London
- Grado en Ciencias del Deporte, la Salud y el Ejercicio por la University of Surrey
- Posgrado en Psicología Positiva Aplicada y Psicología del Coaching por la University of East London
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